La Minga VIII, 25 de octubre, estuvimos de festejo.

Amingas y Amingos

Hay personas que saben ponerse el alma justo a tiempo y así alargan los minutos de magia, silencio y desvelos.
Hay personas que saben quitarse el alma justo a tiempo y así multiplican los minutos de magia, silencio y desvelos.
Hay personas que dan todo lo que tienen y todo lo que no tienen, justo a tiempo, igual que la sangre que siempre acude a la herida, también, justo a tiempo
Hay personas que se quitan y se ponen al alma justo a tiempo. En general estas personas son la misma persona, como el “ser” o “no ser”.
Y es la misma, siempre es la misma persona la que hace todo esto justo a tiempo y casi al mismo tiempo, y lo hace en el momento adecuado, en el preciso instante del deseo, o en el último instante, antes del estallido.
Y es la misma persona que hace de la vida una fiesta, donde dar y recibir sea lo cotidiano, sin preguntar y sin pedir algo a cambio.
Y hay personas como vos y como yo, tan simples, como un despertar.
Hay personas, pero siempre es la misma persona la que hace que sigamos siendo seres únicos e irrepetibles, esa persona es mi amigo, que soy yo pero con otra piel.

Mariano.
Octubre 2008, antes de La Minga VIII.

Y gracias a todas estas personas, volvimos a hacer otra hermosa Minga:

A Marisa Velázquez, cálida persona que coordinó el seminario de expresión folklórica previo a La Minga, gracias querida amiga.

Ana Laurino, Elisa Molina y Hugo Cazón, que cantaron en el comienzo de la peña.

A Marisa Velázquez, León Meotto y Alejandra Valdéz, quienes bailaron y nos hicieron disfrutar con su intervención.

A Ayelén Molina y Hugo Cazón, también bailaron demostrando sus virtudes y armonía de movimientos.

A Eliana y Martín, bailando folklore tradicional.

A Tierra en los pies: Vika, Inés, Viky, Lara y Melisa, que nos hicieron vibrar con el retumbo de los cajones.
A los compañeros de la comunidad QOM, que participaron con Tierra en los pies.

A Diego Quaranta y Hugo Cazón, que no regalaron los bailecitos con los que entregamos los pañuelos y a León, que nos ayudó con la idea de distribuirlos como regalo de cumpleaños Minguero.

A Los Ralos y Zapateá Lechuza, que nos hicieron bailar hasta el último minuto de la peña.

Al grupo de clown conformado por :
Toilette, Gluten, Perfidia, Perpetua, Clarita Rosafango, Corel, Danal y Gigo.


A las Mingas:

Ana, Elisa, María, Matilde, Florencia, Evelin, Celia, Mara, Celeste y Carolina.

A los Mingos:

Diego, Ovidio, Dieguito, Mariano y a Fito, que estuvo lejos en la distancia pero adentro de nuestros corazones.

A María y Agustín, Florencia, Belén y Melina, que cuidaron un rato la puerta, a Gabriel ( el Pela), que ayudó desde temprano trabajando en lo que hiciera falta, a Matías, que ayudó en la barra de bebidas, a Dani Godoy, que siempre nos acompaña aportando su sabiduría y solidaridad.

También saludamos y agradecemos a la abuela de Celeste, que generosamente cortó la tela para hacer los pañuelos.

A Celeste, María y Celia, entre las tres hicieron las terminaciones de los pañuelitos.

Al señor Juan Pablo que nos llevo en su camioneta al salir de la fiesta y nos dejó a cada uno en la puerta de casa (incluyendo diversos bagallos e instrumentos).

Al Señor Oscar y el Señor Terich, que nos atendieron y cuidaron en la fiesta.
Al Señor Martín, de la oficina de Acción Social del Sindicato de Municipales, que nos vino a saludar.

A Diego Diaz, fotógrafo oficial de La Minga.

A Carolina Jakas y Naty Benedetto, que cocinaron las empanadas.

Al Señor Rubén que nos trae las cervezas, al Comercio Solidario Mink'a, que nos trae los vinitos y y al asador...

Y gracias a todas las amingas y amingos que nos acompañan y se divierten para hacer de La Minga un espacio de creación folklórica colectiva cada vez mejor.